Sobre la crisis del papel y el futuro editorial
julio 26, 2010

Por Juan Pablo Canales

Llevo un poco más de 3 años trabajando como diseñador. Y en ese tiempo siempre me he dedicado a un area de la cual soy un asérrimo defensor: el diseño editorial y el trabajo de imprenta. Durante mis años de estudio en la Chile se dieron una serie de factores que me ligaron estrechamente al diseño de información en papel más que en la plataforma digital. Aún cuando en paralelo ya se hacía explícito que Internet afectaba de sobremanera la continuidad de la industria.

Y claramente: los contenidos lograron democratizarse aun más; el feedback permitía conectar y conocer aun más a los lectores/usurios; la actualización en tiempo real de la información y asi sumando y sumando una serie de buenos (si... digámoslo: buenos) factores que respondían en forma natural a la línea de la comunicación en estos tiempos. Factores que de pasadita impactaron a la industria editorial en cuanto cada vez menos la gente recurre al ritual de hojear, de tomar el objeto/libro/revista/diario y leerlo. Muchas revistas del mundo cerraron y las subscripciones son cada vez más la estrategia preferida para asegurar al nicho.

Nunca me cuestioné demasiado esta realidad. Siempre me vi usando InDesign eternamente, creando estas publicaciones de futuro incierto. También quizas porque gran parte de los encargos que realizamos en la agencia son para instituciones, con presupuestos asignados y un tiraje mediano pero seguro. Quizas si de mi trabajo dependiera una revista que se cuelga en los kioscos sentiría más en los huesos este análisis.

Pero no por eso hay que hacer la vista gorda. También porque hay otro factor de por medio: el sustrato, nuestro papiro salvador, proviene de una fuente natural que hoy por hoy necesita de una atención mundial a nivel medioambiental. La tala indiscriminada, las cada vez menos zonas protegidas y el contexto político en el cual los arbolitos están hoy situados hacen que debamos considerar con mayor atención al sustrato. Un ejemplo: compren El Mercurio este domingo y verán que la mitad del diario no se lee... se desecha.

Pero como dije al comienzo: soy un diseñador romántico. Defiendo siempre el ejercicio editorial. Hago porras con plumeros y con coraje a la industria cultural más antigua de la humanidad. Y es por eso que asumo este complejo camino para mantenerlo.

Y en ello, las palabras de Felipe Taborda me animaron profundamente. Porque tengo la suerte de estar haciendo un diplomado en Editorial y Comunicación (con el alto auspicio de mi bolsillo y gentileza SENCE... XD!) y en donde el brasileño Felipe Taborda, destacado diseñador, planteó este contexto, brindando sencillas soluciones y palabras justas desde su experiencia. Un gayo sencillo, muy simpático y prendido como él solo (quedamos de ir con el curso al Liguria antes de que se vaya a Rio), que puso en el tapete la labor del diseño en este camino.

Y la respuesta que se extrajo proviene no precisamente del diseño, sino de algo anterior. Porque efectivamente: podemos ser muy buenos diseñadores; podemos hacer las infografías más premiadas y las ilustraciones más bacanes; podemos dividir nuestra página maestra en la grilla más moderna y util del universo. Pero si el CONTENIDO no prende, estamos sonados.

Porque a estas alturas nosotros los diseñadores tenemos la posibilidad (o la responsabilidad) de participar también en los contenidos, tenemos en mayor o menor medida importantes opiniones en torno a la linea editorial de nuestras publicaciones y, en el mejor de los casos, generar contenido, proponer la mirada y finalmente, plasmarla en diseño. Cuando vemos esta ventana, nos damos cuenta que si hacemos la labor de encontrar contenidos para nichos nuevos o renovar aquellos que ya están, el diseño de por sí se sustenta.

Los buenos diseños son inútiles si respaldan malos contenidos; pero los buenos contenidos se mantienen incluso con malos diseños.

La ecuación parece funcionar dentro de su sencillez. Claramente no es fácil, pero aqui los diseñadores tenemos no una pega "extra", sino una pega intrínseca, propia, presente que realizar: la de responder al feedback de nuestros lectores/usuarios; la de descubrir nichos; la de proponer discursos y puntos de vista. Mi vieja dice "siempre hay un roto para un descosido". En su defecto, siempre tendremos a alguien que se interese por un contenido en particular. Sólo debemos descubrir quienes son aquellos "descosidos" que puedan generar un buen nicho y que se apasionen no con nuestro diseño, sino que por nuestro contenido.

Y sé que sonará cliché, pero sé que ninguno se imagina en un cubículo trabajando de corbata en una compañia telefónica. Nadie debería trabajar en lo que no le gusta o en lo que no cree. Por eso, es necesario que nosotros mismos creamos en nuestros contenidos, en nuestras líneas editoriales y en nuestros discursos. Sólo así nuestro diseño util y bonito tendrá sentido y el futuro de la industria editorial podrá dormir tranquila todas las noches.

COTIZAR, DESARROLLAR Y MANTENER UNA WEB COMERCIAL (Tips para clientes, entrega 1)
julio 14, 2010

Por Carlos Armijo Q.

En general, los clientes que queremos una web no sabemos más que eso: que queremos una web (a veces ni siquiera sabemos bien si la necesitamos o no), por lo tanto, el desconocimiento y la desinformación son terreno fértil para que la búsqueda del desarrollador se incline, finalmente, por el “más rápido” o el “más barato”, opciones siempre válidas y altamente plubicitadas, pero que en su mayoría terminan en malos ratos, plazos incumplidos que no cubren nuestras expectativas e incluso con proyectos que quedan a medias.

Las posibilidades que ofrecen la web y multimedia para nuestros productos y servicios son infinitas, pero aprovecharlas al máximo depende exclusivamente de nuestras primeras decisiones como clientes. Este artículo no pretende ser un manual acabado de cómo pensar una web, en qué fijarse al cotizar o cómo determinar su eficacia en nuestros planes de marketing, sólo se quiere aportar con un granito de polvo cósmico al universo digital, un par de tips y consejos que en 5 minutos de lectura pueden ayudar al momento de decidir quién puede desarrollar de mejor manera nuestro proyecto en Internet. Aquí vamos...

Antes que todo:

Antes de cualquier idea, objetivo o petición sepa que existen 3 cosas fundamentales para poner en línea una web, que trabajan como si fueran una sola… pero no lo son. El Nic, el Hosting y la Web(los archivos que la componen).

Nic: El nic es el nombre de su web en Internet, la dirección o el famoso www.juanitoperez.cl., donde juanitoperez es el nombre que usted quiere darle a su web y el “.cl” (en el caso de Chile) la denominación de origen. Existen tantas denominaciones de origen como países, pero, también, existen denominaciones según el tipo de institución para la que sea la web, .com(comerciales), .org(organizaciones sin fines de lucro) .gov(gobiernos), etc.

En Chile el .cl lo administra y regula nic.cl, un organismo dependiente de la Universidad de Chile y no hay otro. Le recomiendo que consulte y contrate usted mismo en www.nic.cl, para que no le vengan con cuentos y “ofertones” medios raros.

Hosting: El hosting es el lugar físico donde se almacenará su web (los archivos que la componen). En palabras muy simples es un computador especial, con requerimientos de seguridad especiales, consumo de energía especial y por sobre todo que es capaz de estar las 24 horas del día, los 365 días del año encendido y conectado a internet(este computador especial se llama Servidor), con el fin de que cada vez que alguien quiera ver su web pueda acceder a los archivos que la componen a través del nic, no importando la hora del día, la fecha o el lugar del mundo. Sin ánimo de ofender, aún hay gente que tiene la ilusión de que, una vez terminada su web, esta quedará flotando en el Cyber Espacio. Déjeme ser el malo del curso y decirle que el Cyber Espacio no existe, no es más que una bella metáfora para denominar a todos estos servidores conectados entre sí y a la vez a los computadores de los usuarios. Los archivos deben estar, físicamente, alojados en alguno de estos servidores para ser vistos, a ese alojamiento se le llama hosting. Generalmente se venden planes de hosting que incluyen espacio para los archivos, casillas de correo y extras. La cantidad de espacio que necesitará para contratar dependerá del tamaño y peso (kilobytes) de su web.

La Web: La web o el sitioweb es un conjunto de archivos estructurados y ordenados con el fin de presentar información de diversa índole y naturaleza. Es la apariencia de estos archivos, su formato, interactividad y creatividad lo que marca la diferencia… ahora sí, quiero una web.


Cotizar una web
Quiero una Web, ¿la necesito?

Sin lugar a dudas el tener presencia en la web es un hecho indiscutible, hoy en día no estar en línea es no existir prácticamente. Pero ¿tener presencia es la única necesidad que quiero cubrir con mi web? Poner la presencia como único objetivo de una web es simplemente desaprovechar el medio y los recursos. Algunos objetivos que podemos definir para nuestra web son por ejemplo:

Informar mis productos y servicios.
Atraer público (actividades y eventos).
Aumentar mis ventas.
Conseguir distribuidores.
Vender directamente por Internet.
Generar negocios a nivel local.
Hacer negocios a nivel nacional.
Generar negocios a nivel mundial.
Crear directorios de clientes, etc.

Estructura de la web

Tener claro los objetivos de nuestra web y jerarquizarlos son el primer paso para solicitar una cotización y tener como referencia quién nos ofrece mayor confianza. Generalmente al detallar nuestros objetivos, el desarrollador ya nos puede ofrecer un pequeño esbozo o esquema del menú de nuestra web. Por ejemplo, algo sencillo, teniendo en consideración que el objetivo base de una web es la presencia en Internet, pero que el mío como cliente es informar mis productos y servicios, podríamos encontrar una propuesta como la siguiente:

Home
Casi siempre esta sección es ocupada por productos destacados, generalidades de la empresa, promesas comunicacionales y esfuerzos de posicionarnos de la mejor manera en la cabeza de nuestros clientes.

Empresa
Esta sección detalla la historia de la empresa con el fin de dar confianza y respaldo a nuestros clientes.

Equipo
Es bueno, pero no indispensable, presentar al equipo humano que está detrás de un producto o servicio.

Productos y Servicios
Esta sección desglosa de manera específica cuáles son los productos y servicios que ofrecemos.

Contacto
Diversos medios por el los cuales podemos tener contacto con nuestros clientes, información de mails, teléfonos, fax y direcciones físicas si nos interesa, a veces incluso un pequeño mapa de cómo llegar a nuestro local es de mucha ayuda.

Esta pequeña estructura, en el caso del ejemplo, es la columna vertebral de una web y se conoce casi siempre como SECCIONES, son estas secciones las que determinan lo extenso de nuestra web y también en gran parte el costo. Pero hay por lo menos dos Ítems más que nos pueden ayudar a alcanzar de buena manera los objetivos de nuestra web, Servicios y Extras.

Los Servicios son herramientas que nos permiten manejar ciertos aspectos de nuestra web de manera interna, como por ejemplo:

• Estadísticas y Contadores.
• Motor de Búsqueda.
• Libro de visitas y comentarios.
• Formularios de contacto y cotización.

Los Extras son herramientas que nos permiten relacionar nuestra web con nuestros clientes de manera más cercana y cotidiana, por ejemplo:

• Traducción en diversos idiomas.
• Módulos de actualización propios.
• Vinculaciones con Facebook
• YouTube
• Blogs
• Tweeter
Y un sin fin de etc., etc.

Como vemos los objetivos de una web son primordiales, si como clientes no tenemos claros para qué queremos y necesitamos una web, es difícil y oneroso encontrarle una razón por el camino.

Tenemos los objetivos, vislumbramos una estructura y las secciones, esperamos que nos ofrezcan Servicios y Extras… pero falta una Idea, siempre es bueno darse una vuelta por el barrio y ver que hace la competencia. Entrar a Internet y buscar algunas páginas de otras empresas que ofrezcan productos y servicios similares a los nuestros, siempre es aconsejable para sacar algunas ideas y observar tendencias, no tenga miedo a mirar y mandar las direcciones que más le llamen la atención a su desarrollador, así él se podrá hacer una idea de lo que a usted le gustaría.

primera(1) entrega de tres(3).

puede leer el artículo completo en:
www.simplecomunicacion.cl
Signos iluminados
noviembre 06, 2009

Por David Núñez

El interés por crear y manipular los signos con que nos comunicamos ha sido desde siempre uno de los anhelos del hombre a través todas las épocas de su existencia. Desde los jeroglíficos a las señales del tránsito y desde los tótems hasta las banderas y escudos nacionales. A grandes rasgos, de allí surgen lo que hoy conocemos por signos simbólicos, desarrollados específicamente para producir una significación particular, en principio altamente intencionada, aunque con el paso del tiempo y el uso esa intencionalidad original pueda sufrir variaciones de sentido e interpretación. Dentro de estos signos encontramos el signo ideológico, de raíz siempre más profunda y que busca traspasar no sólo un valor convencional y genérico, sino también una forma de ver y sentir la vida dentro de un grupo social determinado.

Magariños explica la configuración de este signo ideológico a partir del planteamiento de Saussure y su ya famosa dicotomía del signo (significante / significado). En términos simples, Magariños plantea básicamente que un significante tiene en realidad 2 significados. El primero es el significado o concepto tal cual como lo plantea Saussure, y el segundo es el significado sintáctico o de posibilidades sintácticas, que establece las relaciones de ese significado con otros significados y su posición en el sistema de signos al que alude, con respecto a esos otros términos.

Sin embargo Magariños también plantea que hay otro tipo de significante: el objeto semiótico, que viene a ser la forma ya conocida, a través de procesos mnémicos, de un significante en particular. En otras palabras, es la reconstrucción mental, en cuanto forma, de un objeto a través de la memoria o atractor mnemónico como lo llama Magariños. Pues bien, este significante tiene a su vez los mismos 2 significados anteriores que plantea Magariños sobre el significante clásico de Saussure: el significado conceptual y el significado sintáctico. Al cruzar estos 4 elementos surgen los 4 signos que propone Magariños, siendo el último el signo ideológico, y que es el que nos interesa en este momento:

Significante / Significado sintáctico (relacional) = Signo metasemiótico sustituyente
Significante como atractor mnemónico / Significado conceptual = Signo metasemiótico sustituido
Significante / Significado conceptual = Signo mediador (tal como lo plantea la dicotomía de Saussure)
Significante como atractor mnemónico / Significado sintáctico (relacional) = Signo ideológico

Imaginemos que el signo “casa” lo llevamos a un significante icónico. Para Magariños este significante estaría constituido por la foto o el dibujo de la casa que se nos muestra y que inicia el proceso de descodificación. El significado conceptual es lo que ese término nos gatilla en cuanto a significado clásico e individual: hogar, familia, calidez, peleas con los hermanos, etc. El atractor mnemónico (significante también), en tanto, es la casa en términos perceptuales y formales que tenemos en nuestra memoria y que nos permite reconocer una casa cuando la vemos, diferenciándola de un edificio o una choza. No es la casa en particular en frente nuestro, sino lo que nuestra memoria nos indica qué es una casa. Y finalmente tenemos el significado sintáctico, que son todas las posibilidades estructurales y de relación del significado casa con otros significados. Así podemos tener una casa arriba de un árbol, o una casa rodeada por edificios, o una casa frente al mar, etc. Se refiere, de este modo, a la posición que ocupa el significado en un sistema de significados asociados y que permite extraer diferentes lecturas.

Lo interesante del signo ideológico entonces, siguiendo a Magariños, es que permite manipular e intencionar, a través de las combinaciones sintácticas de los significados (no sólo de los significantes), un discurso ideológico específico (a favor, en contra, con indiferencia) de un fenómeno en particular, de un grupo de personas, de una forma de actuar, de un interés individual o social, etc. De este modo, la suma, y sobre todo, la configuración estructural de los significados es lo que permite finalmente desarrollar un signo más elaborado, generando así en el receptor una interpretación mucho más rica y connotadota.

A mi juicio, uno de los ámbitos donde mejor se manifiesta este manejo semiótico, es el conjunto de signos propios de la masonería. En este contexto encontramos una serie de signos creados especialmente para producir un simbolismo que represente los valores e intereses de la diversas logias que coexisten dentro de este movimiento. Lo atractivo de estos signos es que sus significados pese a ser altamente simbólicos, no son altamente convencionales, como ocurre en otras disciplinas. Los signos masones, por lo general, requieren de un conocimiento previo del código con que están construidos, conocimiento que finalmente permite entender en forma más plena el discurso que se pretende comunicar. Esto logra que pese a que los signos están allí, a vista de todo el mundo, no todas las personas puedan descifrar el mensaje oculto que subyace detrás de ellos. Sin duda el carácter hermético y concentrado de estos grupos contribuye a dificultar la aproximación a estos signos, funcionando como una especie de llaves que se van entregando a medida que la persona avanza en el escalafón de cada hermandad.

La verdad es que la cantidad de signos masones son innumerables y cada logia posee sus propios elementos de identificación. Sin embargo, y en términos muy generales, dentro de los más antiguos podemos encontrar los signos lapidarios, que funcionan como especie de firmas en base a círculos, líneas y espirales, y que constituyen la base de todos los demás signos masones más elaborados. Otro signo tradicional es la escuadra y el compás, que se acompaña además de una letra G al medio, letra que representa la Gnosis (conocimiento superior) al que sólo se puede llegar a través de un sublime trabajo interno. También tenemos el Ara, el Águila Bicéfala, la Piedra Cúbica y la Piedra Bruta, el Pelícano, la Cruz en Seis Direcciones y el famoso Gran Ojo del Arquitecto, por nombrar algunos más.

Otro signo gigantesco también es la estatua de la libertad, diseñada en Francia por el francmasón Frédéric-August Bartholdi y construida más tarde por Alexandre Gustave Eiffel, también francmasón. Esta estatua representa la Diosa Isis, que mira hacia Egipto y que con su antorcha alumbra el progreso y la libertad de la humanidad en sentido Luciferiano (como portador de luz).

Pero sin duda uno de los signos más interesantes del registro icónico de la masonería es la pirámide que aparece en los dólares americanos. De clara influencia Illuminati, el signo está compuesto por el resplandeciente ojo que todo lo ve, sobre la punta de la pirámide, y que según algunas interpretaciones representaría el Mesías oculto que anunciaban los Kabbalistas y que aparecería también en la Biblia y el Islam. Este Mesías tendría un solo ojo y gobernaría a todos los pueblos de la tierra sin distinción. Por otra parte, la pirámide posee 13 grados, que representarían los 13 grados Illuminati que están por sobre los cánones masones estándar, y que suponen un cierto control por sobre las demás logias. Debajo encontramos el año 1776, fecha de fundación de los Illuminati, y la frase “Nuevo Orden Secular”, justamente uno de los grandes objetivos planteados por los Illuminati al momento de su formación. Arriba aparece la frase “Annuit Coeptus” que significaría algo así como “nuestra empresa es exitosa”, en una clara confirmación de los significados expresados anteriormente. Si utilizando como base la pirámide se dibuja una estrella de David, veremos también que las letras indicadas por cada punta forman la palabra MASON.

A decir verdad, y aunque en otras partes del billete aparecen también otros signos masones, como el águila, el búho, una estrella de David creada por 13 estrellas más pequeñas, y otros más, que estos signos sean masones no es ninguna novedad en sí misma. Los signos no intentan ocultarse de nadie, están allí a la vista de cualquiera, y nadie tampoco los ha negado como manifestación masónica. Lo que hace fascinante a estos signos es que se ocultan gracias a su simbolismo. Sin poseer una construcción excesivamente compleja en términos sintácticos, dificultan la interpretación al grado de hacer casi imposible su entendimiento a personas sin algún conocimiento previo particular. Todo signo requiere un conocimiento anterior para poder interpretarse correctamente, pero en el caso de los signos masones, este conocimiento es mucho más específico, pues conforman una hermenéutica restringida y sectaria. Esto hace que los signos funcionen especialmente para algunos, dejando al resto fuera del umbral semántico donde ellos habitan, y sólo esperando que aparezca el código mágico que produzca la epifanía.

De esta manera, y este es uno de los grandes atributos del fenómeno a mi modo de ver, el planteamiento ideológico se mantiene, se protege y se conserva casi intacto. Las distorsiones se minimizan, evitando así interpretaciones erróneas y fuera de lugar. Al igual como en los grupos religiosos más pequeños, la doctrina se fortalece, conserva su espíritu y mantiene apegados a los feligreses. El signo ideológico triunfa, sin que nadie se de por enterado, lo que no deja de ser un triunfo doble y mucho más significativo para aquellos a quienes pertenece a fin de cuentas su interpretación final.
Vivir como allegado
septiembre 28, 2009

Por Carlos Armijo Q.


Navegando por ahí me encontré con “Alive in Joburg”, un cortometraje de 2005 escrito y dirigido por Neill Blomkamp, un realizador Sudafricano, que relata en casi siete(7) minutos la historia de unos extraterrestres que terminan como refugiados en Johannesburgo, la ciudad más grande y poblada de Sudáfrica. Es interesante, más que los efectos especiales, bastante buenos, la temática propuesta en la historia. Los humanos, en general, de todos los credos y razas nos dedicamos a complicar la convivencia incluso a veces con nuestros propios familiares.

Esta semana (1 de Octubre) se estrena en Chile Sector 9, dirigida por el mismo Blomkamp y este film no es más que su cortometraje (Alive in Joburg) inyectado de de lucas Hollywoodenses, esperemos que no se haya convertido sólo en una maraña de efectos especiales.

Abajo el cortometraje entero de Blomkamp y al final un trailer de Sector 9.





Disfunciones Semánticas
abril 08, 2009

Por David Núñez



Que el contexto hace que interpretemos la realidad en forma distinta es a esta altura un axioma más que probado. Un signo se va a actualizar siempre a partir de los demás signos con que se relacione. Lo mismo sucede cuando adquirimos nuevos conocimientos. Lo que aprendemos nos permite acercarnos desde perspectivas nuevas a paisajes que antes nos parecían cotidianos.

De este modo, cuando aprendemos inglés nos empezamos a dar cuenta que todas esas canciones anglosajonas, que jurábamos tenían un significado trascendental, no eran más que lugares comunes podridos, en su mayoría con letras de amor baboso y quinceañero. I love you, i need you, i want you. Yeah.

A medida que crecemos sucede lo mismo, sólo que muchas veces ni siquiera teníamos conciencia de los significados que nos rodeaban. De chico tarareábamos las canciones que cantaba la mamá mientras hacía el almuerzo, sin siquiera sospechar lo que había tras ellas. La música tiene sin duda una gran la capacidad para connotar, pero es la letra la que finalmente define el sentido. Y claro, cuando uno tiene 7 años ese no es un tema que interese mucho.

“Era en Abril”, de Juan Carlos Baglietto, es simplemente una canción terrible (Se ha muerto mi niño…) Y uno la cantaba como si fuera una hermosa canción de cuna, para quedarse dormido feliz toda la noche. Carlos me comenta “La Séptima Luna” de Emmanuel: el Apocalipsis estaba entre nosotros y nunca nos dimos cuenta. El video clip tiene una estética de higlander sudaca imperdible. Y para qué hablar de “Puerto Pollensa”, de Sandra Milhanovic, y tantas otras.

Pero “Pólvora Mojada”, de Pablo Abraira, es sin duda el descubrimiento mayor. Gracias JP. No es sólo una canción de amor y desamor que uno cantaba como si nada mientras tomaba té en platillo con pan con mantequilla. Es la historia de un tipo que se niega a amar porque no le funciona. La letra es tajante:

Yo te acaricie por nada
por sentirte un poco mía,
me gustaba ver tu cuerpo
y tener tu compañía.

Tú callabas, yo reía
y de pronto me di cuenta,
tú temblabas en mis manos,
me sentí como un gusano
y te dije mírame
tú llorabas, yo no sé

Coro:
Mujer, me estás pidiendo amor
y yo no puedo darte nada.
Mujer, no sigas por favor
por que la llama del amor
no enciende pólvora mojada (2 veces)

Deja ya este juego
que no hay nada más cruel
que jugar con fuego.

Preguntaste hay esperanza
yo te dije no, ninguna
para qué probar fortuna
qué vas a esperar de mí
no te amo, tú a mí sí

Fuiste recogiendo alas
como un águila herida.
Corazón, así es la vida
cuando se juega, el amor
no juguemos, es mejor.

Coro:
Mujer, me estás pidiendo amor
y yo no puedo darte nada.
Mujer, no sigas por favor
por que la llama del amor
no enciende pólvora mojada (2 veces)

Es una canción valiente, no se puede negar. No sé si alguien se atrevería a cantar algo así hoy. En defensa de Abraira sólo podemos decir que tiene una hermosa familia… con robustos hijos incluidos.